Un amargo recuerdo.

El próximo viernes en el estadio Gaspar Mass en Nuevo León, se llevará a cabo el encuentro entre las Águilas Blancas y los Auténticos Tigres de la UANL, desafortunadamente para la historia de ambos equipos el hecho de mencionar este enfrentamiento trae a la mente de muchos aficionados los trágicos eventos acontecidos durante aquel viernes negro de noviembre 11 de 1977 en la capital regiomontana.

No fue un hecho aislado lo ocurrido durante esa fecha, ya que a partir del movimiento estudiantil de 1968, como medida de control se fueron infiltrando en las escuelas tanto del Politécnico y la UNAM los grupos de choque llamados "porros", quienes amedrentaban y golpeaban a los verdaderos estudiantes de los planteles, ante la complancencia de las autoridades.

A manera de bola de nieve, las actividades delictivas fueron en aumento ya que de cierta forma gozaban de una impunidad atroz. Las autoridades de las Instituciones involucradas en futbol americano estaban al tanto de esta situación y poco o nada hacían al respecto, era un secreto a voces que incluso muchos los "patrocinaban" para mantener en paz a la comunidad estudiantil.
En ese entonces la ONEFA no existía como la conocemos ahora, a partir de 1969 se había creado la Liga Nacional Colegial y la forma de elegir a los equipos que disputarían una final se modificaba a lo largo de esa década. Por una parte se enfrentaron el campeón del grupo A los Politécnicos contra los campeones del grupo B los Felinos comandados por el Coach Cayetano Garza (qepd), quienes habían terminado la temporada invictos y por ende recibirían a los volátiles de Santo Tomás en el estadio Universitario, donde acostumbraban jugar en ese entonces.

Dicho sea de paso el equipo norteño era amplio favorito para obtener su segunda corona, habían compartido el título en 1974 con sus acérrimos rivales los Borregos Salvajes del ITESM. Muchos aficionados de la época comenta acerca del gran nivel y calidad en la mayoría de los conjuntos.

El equipo del Coach Jacinto Licea partió a la Ciudad de Monterrey con la esperanza de un título acompañado de un grupo de grandes jugadores y basaba su ataque en la formación Wishbone, en la cual empleaban tres corredores en el backfield y era la formación del éxito para muchas universidades de los Estados Unidos de América.

El viaje a la ciudad del norte por miles de aficionados fue opacado por la serie de disturbios que generaron en el trayecto los porros del Politécnico; quienes cometieron muchos desmanes por cuanto lugar pasaban.
Previo al calentamiento en el vestidor de los Politécnicos, se sucitó la penosa situación cuando unas personas presuntamente ligadas a la UANL, interrumpieron la charla del entrenador Jacinto Licea y amedrentaron a su equipo con amenazas a los familiares de los jugadores que se encontraban en la tribuna si lograban la victoria.

Uno de las aficionados que sufrieron las agresiones por parte de los pseudoaficionados de los Tigres fue Alejandro "Bonavena" Ramírez, famoso defensa del Atlante quien acompañaba a Víctor Ramírez y comentó lo sucedido con gran tristeza.

Media hora antes de iniciar el encuentro se agredieron los pseudoaficionados de ambos equipos, las asientos del estadio Universitario eran de madera y fueron arrancadas para usarse como armas. Uno de los integrantes de los porros Politécnicos,  Jorge Tapia González conocido como el "Mala Madre" portaba un arma de fuego con la cual se presume mató a un aficionado rival e hirió a Mario Alberto Ibarra Martínez, el cual perdió la movilidad de sus piernas de por vida y recientemente fue entrevistado recordando los hechos de esa noche.

El juego aún no comenzaba y el ánimo del equipo capitalino se fue por los suelos, ¿quien en su sano juicio estaría concentrado bajo esa situación tan desagradable e incómoda. Los entrenadores de los felinos comentaron acerca del estado ánimo de sus rivales los cuales comentan nunca opusieron resistencia y se generó una actuación por más espectacular de su corredor de segundo año Juan Manuel Bladé quien se despachó con 415 yardas en 43 acarreos y cinco anotaciones terrestres. Al final el resultado fue de 66-0 para los Tigres quienes levantaron su segundo titulo en la historia.

Esta situación fue uno de los detonantes para que los Borregos Salvajes abandonaran la liga y dos años más tarde debido a un problema sucitado en la tribuna del mismo estadio pero esta vez contra los aficionados de las entonces Águilas Reales de la UNAM, provocó la expulsión de la liga del equipo felino.

Debido a esta situación se hace una restructuración y se crea la Organización Nacional Estudiantil de Futbol Americano (ONEFA) lamentablemente para la afición las riñas y atropellos por parte de los porros no disminuyeron en la década de los ochenta, eso provocó la ausencia en los estadios de la familia y que se tachara incorrectamente de violentos a los partidos efectuados por la liga.

Los Borregos Salvajes se incorporan a la Conferencia Nacional a mediados de los ochenta y los Auténticos Tigres se incorporan a la ONEFA a partir de 1991, reanudando los encuentros con sus otrora rivales.

La serie entre ambos equipos muestra hasta el momento los siguientes números, Águilas Blancas domina la serie con 21 victorias contra 19 de los Auténticos Tigres, la última vez que los vólatiles derrotaron a los felinos fue en el 2007 con marcador de 17-0.

Para ambos equipos es de suma importancia la victoria;  los pupilos del Coach Pedro Morales marchan invictos hasta el momento, en su arsenal ofensivo destan el quarterback Roberto Vega (12) y los corredores Joel Rodríguez (4), Napoleón Juárez (29) y Joaquín González quienes se han combinado para un total de 149 puntos y destaca a la defensiva el jugador Roberto Razo quien contra Los Leones de Universidad Anáhuac campus Cancún interceptó tres ovoides y llevó dos de ellos hasta anotación. Con base en las actuaciones mostradas, los actuales campeones lucen potencialmente como favoritos para repetir, del resultado que obtengan en la visita a Ciudad Universitaria la próxima semana ante los Pumas Dorados , se podría decidir la localía del juego final.



Para las huestes del Coach Héctor López enfrentan un duro sinodal en sus aspiraciones a las semifinales de la liga, hasta al momento marchan con récord de 2-1, en el quinto lugar de la clasificación y la lucha por uno de los puestos será muy reñida, pues aún les falta enfrentar a sus hermanos de Institución a los Frailes de la Universidad del Tepeyac y los Linces de la Universidad del Valle de México quienes están en la lucha por un boleto.

Héctor Salinas.