Tardes de otoño.

Una pausa en el camino.

La Universidad de Notre Dame acordó suspender la serie de encuentros contra la Universidad de Michigan, a partir de la temporada 2015 y se pretende reanudar el compromiso hasta el 2017; lo anterior debido al ingreso de los Irlandeses Peleadores a la Conferencia de la Costa del Atlántico (ACC) al romper la independencia de pertenecer a una conferencia.

Esta serie comenzó en el año de 1887 en casa de los Wolverines, quienes se impusieron por marcador de 8-0; a partir de ese momento se escribió una de las rivalidades más importantes en el futbol americano colegial,  hablar de estas escuadras es sinónimo de campeonatos y ganadores del Trofeo Heisman; cada equipo ha registrado 11 campeonatos nacionales en sus vitrinas y entre ambos suman 10 estatuillas de bronze. Eso sin contar la cantidad de grandes jugadores que han aportado a la NFL durante su larga trayectoria.

Los Wolverines acumulan el mayor número de victorias con un total de 23 ganados contra 16 derrotas y un empate. Los juegos entre ambos equipos suelen ser muy emotivos, para muestra basta un botón, previo al choque del pasado fin de semana, los Wolverines de la mano del Coach Brady Hoke habían ganado los últimos tres enfrentamientos al anotar en los 30 segundos  finales del encuentro. El mariscal Denard Robinson se había convertido en una verdadera pesadilla para la defensa de los Irlandeses, ya que en los últimos dos enfrentamientos acumuló un total de 944 yardas totales.

Los Irlandeses Peleadores por su parte han comenzado la temporada a tambor batiente con tres victorias consecutivas y una defensa sólida y rápida encabezada por el linebacker Manti Te´o, quien es un serio candidato a los galardones de fin de temporada como el mejor jugador defensivo de la nación y se le considera también dentro del rango de los aspirantes al trofeo Heisman, honor que sólamente ha obtenido un jugador defensivo en la persona de Charles Woodson, curiosamente de la Universidad de Michigan en 1997 cuando fueron campeones nacionales.

Para el equipo del Coach Brian Kelly (Notre Dame), era de suma importancia terminar con esa racha negativa, debido al compromiso que adquirió al dirigir a uno de los equipos más importantes de la Unión Americana y se espera pueda a su vez sumar un título más al historial ganador de la Universidad, ya que el último campeonato se obtuvo en el año de 1988 de la mano del entonces Coach Lou Holtz.

El juego se programó en el horario estelar nocturno para beneplácito de los millones de aficionados de ambas escuadras; aunque en esta ocasión el juego se vio plagado de errores por parte del Mariscal Denard Robinson quien fue interceptado en cuatro ocasiones y fumbleo además un balón en la yarda 8 del rival al comenzar la primera serie del tercer cuarto.

Por su parte el equipo Oro y Azul tuvo una de las mejores actuaciones a la defensiva en muchos años, maniataron a uno de los ataques más explosivos de la NCAA y su estelar capitán Manti Te'o interceptó dos pases para frenar avances importantes de los Wolverines.

El Coach Brady Hoke deberá ajustar las piezas para lo que resta de la temporada, si es que aspira a un tazón importante en enero; aún le resta la parte más difícil del calendario, le falta enfrentar a los Espartanos de Michigan State, a los Recolectores de Maíz de Nebraska y cierran de visitantes ante los Buckeyes de Ohio State.

Para Notre Dame el calendario no luce nada fácil tampoco, en las siguientes dos semanas reciben a los Huracanes de Miami y a la Universidad de Stanford  y tendrán dos duras visitas ante los Sooners de Oklahoma y cierran la campaña en el Coliseo de Los Ángeles ante su acérrimo rival los Troyanos de la Universidad del Sur de California.

Las sorpresas están a la orden del día cada semana en el futbol americano colegial y como dicen !esto apenas está comenzando!