Siempre
hay una primera vez.
El sueño de la mayoría de las franquicias de la NFL es poder jugar un Super Bowl en casa, al ser elegido como destino para hospedar el máximo evento deportivo, los aficionados han suspirado durante 54 años en poder ser testigos de tal acontecimiento; el “maleficio” se ha terminado.
El estadio Raymond James será testigo de honor al representar la casa de los Bucaneros de Tampa Bay en el Super Bowl LV cuando reciban a los actuales campeones de la NFL, los Kansas City Chiefs.
A lo largo de la historia de los juegos del super domingo, será la primera ocasión en que se enfrenten los últimos dos quarterbacks campeones: previos; Patrick Mahomes Super Bowl LIV y Tom Brady Super Bowl LIII.
El destino de un ganador.
En
algún momento el veterano pasador comentó su deseo de jugar hasta la edad de 45
años; fue criticado por mencionar su intención de continuar una longeva
y exitosa carrera; cuando dejó las riendas del equipo de Foxborough Massachussets
y expresó sus ganas de emigrar a otro escuadrón que le pudiera ofrecer la
oportunidad de seguir jugando fue muy cuidadoso en elegir su próximo destino;
Un
cambio de aires hacia un destino más benévolo en cuestión de clima sería lo más
adecuado y su deseo de ganar lo llevaron a la Florida donde un equipo esperaba
encontrar al capitán que pudiera enderezar su rumbo y volver al protagonismo.
El coach Bruce Arians acertó al darle la oportunidad a Tom Brady de unirse a su
conjunto y el trabajo comenzó a rendir frutos desde su llegada con el equipo de
Tampa Bay.
Convenció a uno de sus jugadores más confiables en abandonar el retiro y probar suerte con los Bucaneros; el ala cerrada Rob Gronkowski se unió al proyecto para reunirse con su mariscal de campo y probar suerte en la Conferencia Nacional.
Una
colección de récords en sus hombros.
Hablar
de las marcas de Tom Brady en su carrera requiere de un capítulo aparte del
cual no se ha terminado de escribir aún su historia;
Jugará
su décimo Super Bowl, seis anillos de campeón y tres derrotas.
Se unió al legendario Johnny Unitas (1950, 1960, 1970), en jugar un juego de campeonato de conferencia en tres décadas diferentes. Tom Brady (2000, 2010 y 2020).
Las
defensas aún ganan los juegos.
La
unidad comandada por el coordinador Todd Bowles ha dejado claro que para ganar
en la NFL será necesario contar con una gran defensiva; en dos juegos ante los Packers
sumaron nueve capturas para una pérdida de 74 yardas, tres pases interceptados,
provaron tres fumbles, 21 golpes al pasador y dos anotaciones. Una muestra del
nivel de presión que ejercieron hacia el quarterback Aaron Rodgers.
¡Revancha
a la vista!
Patrick
Mahomes y Tom Brady se han enfrentado en cuatro ocasiones, han compartido
victorias y buscarán el desempate en el juego más importante de la temporada: en
el Super Bowl LV. En el 2018 Kansas City sufrió dos derrotas muy cerradas ante
los Patriotas la más dolorosa sin duda la final de Campeonato de Conferencia en
el Estadio Arrow Head de Missouri; Patrick Mahomes aprendió la lección y ha
ganado los dos últimos enfrentamientos también en duelos muy parejos.
No
hay quinto malo, suele rezar el refrán y para los dos pasadores la oportunidad
de ganar una vez más se presenta de manera extraordinaria.
El
ascenso al estrellato.
Patrick Mahomes está demostrando ser el quarterback estelar y cuenta con el mejor equipo de la NFL, con base en sus actuaciones ha logrado posicionar a los Chiefs de Kansas City como el rival a vencer para todos los escuadrones; su talento para lanzar el ovoide así como su precisión y agilidad mental lo han catapultado como la próxima estrella de la liga y está listo para tomar la estafeta generacional.
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Héctor Salinas.
